GILBERTO BENEYTO BORNAY
(BENEYTO)
La narración de este artículo, documentos de archivo y gráficos han sido recogidos literalmente de los volúmenes de la historia de la UD Las Palmas cuyo autor es Antonio de Armas de la Nuez.
Hombre apocado y de hablar pausado no da la imagen de haber sido aquel rudo y expeditivo defensa que conocimos allá por la década de los cincuenta cuando su sola presencia en el campo intimidaba a los delanteros del equipo contario. Aún conserva su inseparable bigote que le hiciera tan popular como una seña fiel de su identidad.
Nacido y criado en La Isleta junto a la Playa de Las Canteras evoca recuerdos de su infancia con gran nostalgia.
- Nací en la zona del Puerto de La Luz el 19 de marzo de 1927. Mis comienzos fueron como todos los niños de la época, dándole patadas a las pelotas de trapo y a las chapas en la calle Tenerife de la Playa de Las Canteras. También en el Colegio de los Padres Franciscanos donde en el recreo jugábamos en el patio formando equipos entre las clases. Recuerdo que a muy temprana edad en aquel patio comencé a aficionarme por este deporte. En este colegio también estaban Padrón, Pepe Mesa, Zacarías, Manolo Torres y los hermanos Silva. Mi primer equipo federado en edad infantil fue el Unión Betis donde jugaban también mis dos hermanos Paco y Mundo, Torres, Padrón, etc... Fue mi hermano Paco quien posteriormente me llevó a un equipo que se llamaba el Madrid de la Plaza de la Feria y jugaba los partidos en el campo del Marino. Recuerdo que en un encuentro le marqué cinco goles a la Gimnástica, equipo conocido por el de "la brillantina" o el de "los señoritos" ya que era filial del Gran Canaria. De allí pasé al Hespérides donde tendría de nuevo como compañero a Manolo Torres. Se da la circunstancia de haber estado juntos en los mismos equipos desde niños hasta finalizar nuestra carrera deportiva.
Equipo del Unión Betis del Puerto de La Luz donde formaron Beneyto, primero a la izquierda de rodillas, y Manolo Torres, último a la derecha de pié.
En el Hespérides también jugaba Antonio Vieira que vivía en mi mismo barrio, en la calle Inés Chemida, y éramos amigos inseparables. Con este equipo fuimos campeones de Canarias jugando yo de delantero centro. Más tarde se interesó por mí el Marino y jugué un partido con ellos de extremo derecho. Mas como yo era victorista, terminé por fichar junto a Torres en el equipo blanquinegro.
Panorámica del Estadio Las Palmas durante un encuentro Marino-RC Victoria en la década de los cuarenta.
Formación del RC Victoria. De izquierda a derecha, de pié: Carretas (masajista), Hernández, Marín, Cárdenes, Polo, Beneyto y Cástulo.
De rodillas: Antonio "El Chillón", Silva, Delfín, Torres y Guerrita.
Equipo del RC Victoria en la temporada 47/48. De izquierda a derecha, de pié: Carretas (masajista), Montes, Tacoronte, Penichet, Yoyo De la Torre, Yayo, Armas y Beneyto.
De rodillas: Tino, Antonio Vieira, Peña, Manolín y Miguel "El Palmero".
¿Cómo llegó Beneyto al fútbol profesional?
- Los verdaderos creadores de la UD Las Palmas, Manuel Rodríguez Monroy y Adolfo Miranda Ortega hablaron conmigo para que integrara la futura selección de jugadores donde nacería el llamado "equipo único". Sin embargo, el tiempo pasaba y los clubs no terminaban de decantarse por el nuevo equipo. Había muchas rencillas y polémicas y todo se iba dilatando en exceso. En uno de los desplazamientos que hice con mi club el RC Victoria a Tenerife, coincidió que fue al partido un directivo del CD Málaga. El club andaluz me ofreció un contrato muy ventajoso para aquella época y que además tenía una duración de cinco años. Me costó mucho tomar aquella decisión ya que mis padres no querían que yo me fuera pero en vista de que la UD Las Palmas no acababa de constituirse decidí finalmente marcharme.
Beneyto defendiendo los colores del CD Málaga.
¿Cuántos años estuvo en Málaga?
- Como ya he dicho firmé por cinco años pero las cosas no salieron de la forma que yo esperaba. El trato que me dispensó la afición malagueña y los compañeros fue magnífico. Tampoco puedo quejarme del entrenador y directivos del club que me asesoraban en todo momento. Sin embargo, tenía una nostalgia muy grande de mi tierra y pensaba continuamente en mi familia.
Debido a esa gran añoranza tuve algunos altibajos en el terreno deportivo. El entrenador, Ricardo Zamora, era partidario de alinear jugadores veteranos y yo compaginaba mis actuaciones con el equipo filial. Me desplazaba con el primer equipo a todos los viajes pero no me alineaba en una demarcación fija; si hacía falta un defensa jugaba yo, si un delantero también, una especie de comodín, y así hasta que vine a jugar la liguilla.
Ricardo Zamora.
Postal de Gilberto Beneyto Bornay (Beneyto) dedicada a su madre con la camiseta del CD Málaga.
¿Esperaba la expedición del Málaga perder en aquella ocasión?
- ¡Qué va! La impresión general era que ganaríamos cómodamente a la UD Las Palmas ya que éramos muy superiores. El Málaga tenía una gran plantilla integrada por grandes figuras y la realidad fue que subestimamos en exceso al equipo amarillo. La travesía en barco fue en plan turista, bañándonos en la piscina y despreocupándonos totalmente del encuentro. Al llegar a Gran Canaria pudimos comprobar que el ambiente era indescriptible y en el campo el partido se desarrolló de una forma muy distinta a la que esperábamos. La UD Las Palmas nos arrolló materialmente. Después del partido le comuniqué al entrenador, Ricardo Zamora, mi decisión de dejar el Málaga y abandonar el fútbol. A mí me quedaban aún tres años de contrato, y el club andaluz, a consecuencia de ello, me declaró en rebeldía.
Extraordinario aspecto que ofrecía el Estadio Las Palmas durante el encuentro UD Las Palmas-CD Málaga. La recaudación del partido alcanzó un beneficio líquido de 267.000 ptas.
Formación para la posteridad. Equipo de la UD Las Palmas que vencería al CD Málaga un 8 de julio de 1951, consiguiendo por primera vez el ascenso a la Primera División del fútbol nacional. De pié, de izquierda a derecha: Pancho Viera, Juanono, Elzo, Yayo, Castañares, Montes y el masajista Juanito Gil.
De rodillas: Manolín, Polo, Tacoronte, Peña, Cedrés y Tatono.
Formación del Málaga que se enfrentaría a la UD Las Palmas perdiendo por cuatro tantos a uno.
¿Y qué sucedió entonces?
- Que vine para mi tierra y decidí tomar las riendas de los negocios de mi padre. Tenía sólo veintitrés años y nadie se explicaba la determinación de haber abandonado mi carrera deportiva tan prematuramente. El presidente del club amarillo D. Eufemiano Fuentes y el entrenador D. Luis Valle vinieron a verme en varias ocasiones y lograron convencerme para que siguiera jugando. Los dirigentes del club canario llegaron a un acuerdo con el Málaga y fui traspasado a la UD Las Palmas junto a mi compañero Manolo Torres.
El presidente accidental del club, Luis Piernavieja del Pozo, pide al CD Málaga la baja del jugador Gilberto Beneyto Bornay.
Carta del presidente de la entidad malagueña D. José Luis Estrada al jugador Beneyto rogándole considerara su errónea decisión de retirarse del fútbol activo.
Carta del CD Málaga pidiendo una compensación económica de trescientas mil pesetas por dar de baja al jugador Gilberto Beneyto.
Carta del CR Málaga transfiriendo los derechos del jugador Gilberto Beneyto Bornay.
TODA UNA VIDA JUGANDO JUNTOS.
Los jugadores Beneyto y Torres a su llegada a la entidad amarilla procedentes del CD Málaga.
Beneyto.
Se dice que ha sido Vd. el único jugador de la entidad que ha jugado toda una temporada sin percibir ningún dinero...
- Efectivamente. El primer año en el club no cobré cantidad alguna en agradecimiento a los dirigentes por haberme resuelto el tema de la rebeldía. Hay que considerar que yo aún tenía tres años de contrato con el club malagueño y no hubiera podido jugar. La UD Las Palmas se vio obligada a depositar una importante suma por mi traspaso.
D. Francisco Beneyto, padre del jugador Beneyto, propietario de la fábrica de helados "La Valenciana".
Beneyto en la fábrica de turrones y helados, propiedad de sus padres, en la calle La Naval del Puerto de La Luz.
Carta de puño y letra del jugador Gilberto Beneyto al presidente de la entidad, D. Eufemiano Fuentes Díaz, recordándole lo pactado en la prima de fichaje.
Ya es jugador de la UD Las Palmas. ¿Cómo comenzó la vida deportiva en nuestro club?
- La UD las Palmas había realizado una extraordinaria campaña el año anterior ascendiendo a la Primera División y aquel formidable equipo formado sólo por canarios caló muy hondo en la afición. Se habían producido algunas nuevas incorporaciones motivadas por la mala clasificación del equipo. La defensa integrada por Castañares, Juanono y Yayo había jugado muchísimos partidos juntos y se conocían a la perfección. Debido a una lesión de Castañares jugando contra el Valencia tuve mi oportunidad, debutando en Zorrilla contra el Valladolid en un encuentro que perdimos por cuatro tantos a uno. Mi partido de presentación ante la afición canaria fue contra la Real Sociedad en aquel famoso partido del árbitro Mazagatos. A pesar de la nefasta labor de este colegiado ganamos por la mínima diferencia con gol de "coronilla" de Tacoronte a pase de Peñita. La alineación era la formada por González; Beneyto, Juanono, Yayo; Pedrín, Ignacio; Cedrés, Lorenzo, Tacoronte, Torres y Peña.
Última presentación de la UD Las Palmas ante sus aficionados frente al CD Castellón en el Estadio Insular.
Esta misma alineación fue la que cerró la competición liguera en Sta. Cruz de Tenerife el 25 de abril de 1954, obteniendo el segundo ascenso de nuestro equipo a la División de Honor.
De izquierda a derecha: Pepín, Beneyto, Torres, Villar, Juanono, Beltran y Gorrín.
De rodillas: Ricardito, Macario, Villota, Gallardo y Peña.
En aquellos años tenía Vd. fama de leñero. ¿Era tan temperamental como se decía?
- Yo era un jugador muy duro. En aquella época se jugaba un fútbol muy contundente y viril y tenía que entrar fuerte al contrario. Los delanteros del equipo rival me tenían miedo. En un partido contra el Atlético de Bilbao recuerdo que golpeé con mis rodillas la columna vertebral de Gaínza. Una vez restablecido, este jugador se pasó el partido amenazándome con el encuentro de vuelta en San Mamés. A mí si había algo que me hirviera la sangre era que me trataran de amedrentar. Así las cosas, en el partido de vuelta en Bilbao salió muy "gallo" dispuesto a atemorizarme. Después de varias entradas fuertes por mi banda donde el árbitro tuvo que parar el juego para que el masajista lo asistiera, el jugador bilbaíno no quiso salir tras el descanso alegando que estaba lesionado.
Gaínza.
LOS ENCONADOS DUELOS ENTRE BENEYTO Y DI STÉFANO
AQUEL FABULOSO REAL MADRID.
Nos visitaba el excepcional conjunto merengue de los años cincuenta y aquella tarde de domingo todos los caminos conducían al Estadio Insular. Por aquellos años se habían iniciado las competiciones europeas y el Real Madrid se había proclamado flamante campeón. En la imagen, de pié: Alonso, Becerril, Marquitos, Lesmes, Muñoz y Zárraga. De rodillas: Castaños, Roque Olsen, Di Stéfano, Rial y Gento.
UN EMPATE QUE PUDO SER VICTORIA.
Formación que presentó la UD Las Palmas frente al Real Madrid que debió terminar con victoria amarilla. De izquierda a derecha, de pié: Pepín, Verde, Beltrán, Beneyto, Gutiérrez, Torres y Castellanos (portero suplente). De rodillas: Juanito Gil (masajista), Ignacio, Sanz, Vázquez, Ricardo y Macario.
Archiconocidas son sus expulsiones con Alfredo Di Stéfano que en aquellos tiempos era considerado el mejor jugador del mundo.
- Alfredo Di Stéfano era un gran jugador pero también era muy marrullero. Fui expulsado en dos ocasiones y se da la coincidencia que las dos fueron a la altura de lo que antes era la caseta visitante. La primera vez él llevaba el balón y yo le entré y se lo arrebaté limpiamente. Cuando me disponía a seguir la jugada me entró por detrás y me dio una patada en el tobillo volviéndome hacia él para repeler la agresión. El árbitro, que estaba cerca de la jugada, nos envió inmediatamente a la ducha pero el jugador madridista no quería salir del terreno de juego. Yo le dije al árbitro que no salía del campo si Di Stéfano no se dirigía primero a los vestuarios. Se formó una gran tangana donde participarían todos los jugadores con agresiones mutuas. Al final tuvo que intervenir la fuerza pública llevándose al argentino fuera de la cancha entre los abucheos del público.
LOS ENCONADOS DUELOS ENTRE BENEYTO Y DI STËFANO:.
El recio defensa Gilberto Beneyto y "La Saeta Rubia", Alfredo Di Stéfano, vivieron homéricos duelos deportivos. Dos años consecutivos sería expulsado el jugador amarillo y en una ocasión el delantero argentino, dándose la circunstancia de que las dos expulsiones se produjeron en las inmediaciones de la que era por aquel entonces, la caseta visitante. En la imagen, Beneyto se resiste a salir de la cancha de juego apoyado por sus compañeros de equipo Paquillo, Juanito Beltrán y Villar, mientras Alfredo Di Stéfano permanece tendido en el césped.
EL MEJOR JUGADOR DEL MUNDO.
Alfredo Di Stéfano, considerado el mejor jugador de todos los tiempos, es obligado a abandonar el terreno de juego por la fuerza pública. En la foto de Hernández Gil, en el camino hacia los vestuarios acompañado de un guardia de asalto.
La segunda vez se pasó el partido provocándome y dándome codazos. En una entrada fuerte que le hice se tiró al suelo haciendo mucho teatro, simulando estar lesionado.
Entonces el árbitro decidió expulsarme a mí sólo. Mis compañeros rodearon al colegiado zarandeándole e incitándole a que expulsara también a Di Stéfano pero éste no se volvió atrás en su decisión.
Se dio la circunstancia que al finalizar dicho encuentro con el Real Madrid el secretario del club amarillo D. Jesús Rodríguez Doreste y el notario de la entidad merengue Méndez Vico, después de un amplio cambio de impresiones en la caseta local, se dirigieron al vestuario arbitral solicitando la reducción de la sanción que era por aquel entonces de cuatro partidos. El árbitro Sr. Birigay, persona comprensiva y ecuánime, redactó un acta favorable para ambos que fuimos solamente multados con amonestación, pese a que dicho incidente trascendió a nivel nacional.
¿Cuál fue el mejor jugador que vio Vd. jugar?
- A pesar de todo, Di Stéfano. Tenía una clase extraordinaria y además se pasaba todo el partido corriendo, animando a sus compañeros o recriminándoles para que lucharan y lo dieran todo en el campo. Disparaba desde todos los ángulos y el campo parecía hacérsele pequeño. A nivel inferior podría citar a Kubala y Kopa que eran jugadores muy habilidosos. De los canarios destacaría por encima de todos al gran maestro Alfonso Silva al que vi hacer jugadas de auténtico genio del balón. También me gustaba el juego de Felo ya que en él se compaginaban la técnica y su gran fuerza física.
Alfonso Silva (El Maestro).
El extremo más difícil...
- En mi larga trayectoria profesional tuve que enfrentarme a grandes extremos como Gaínza, Basora, Gento, etc... Todos me dieron mucho trabajo ya que eran jugadores muy difíciles de marcar. Sin embargo, el más encontrado para mí era Miguel "El Palmero". Habíamos sido compañeros en el RC Victoria y nos conocíamos muy bien. Éramos excelentes amigos y en el campo sabía cómo ponerme nervioso haciéndome perder el control del partido.
Licencia federativa del jugador Gilberto Beneyto Bornay a su llegada a la UD Las Palmas.
Última licencia federativa de Beneyto como jugador de la UD Las Palmas correspondiente a la temporada 59/60.
¿Cuántas veces lo expulsaron de un terreno de juego?
- No lo sé con exactitud pero fueron muchas. Había un compañero, Verde, que llegó a la UD Las Palmas procedente del Atlético de Madrid en calidad de cedido, que era tan duro como yo. En un partido contra el Atlético de Bilbao en el estadio de San Mamés, al término de del primer tiempo por poco no llegamos a la caseta ya que el público nos quería linchar. A Verde, en un saque de banda, le dieron con una gabardina mojada en la cabeza tirándolo al suelo.
¿Quiere contarnos alguna anécdota que le haya sucedido en alguno de sus viajes?
- Se podrían contar a cientos. Jugando contra el Alavés en su campo, Mendizorroza, le dieron a Verde un balonazo en la cara perdiendo un diente de oro. El jugador se dirige al árbitro y habla con él pidiéndole por favor que buscáramos el diente. Al poco tiempo y después de consultarlo con los dos liniers nos reúne a todos los del equipo y nos tuvo buscando el diente de oro que se le cayó a Verde a consecuencia del balonazo. El público comenzó a protestar airadamente y ante la tardanza se unieron también los jugadores del equipo contrario formándose un gran "relajo". Finalmente, después de un largo rato apareció el diente ante las risas del respetable que increpaba a Verde cada vez que éste se acercaba al balón.
Verde.
Recuerdo también otro partido que jugamos en La Línea de la Concepción y ganábamos uno a cero. Entonces el medio volante del equipo contrario da un patadón y el árbitro pita fuera de juego pero al ver que el balón finalmente se cuela en la puerta decide conceder el tanto. Todos nos fuimos hacia donde estaba y lo rodeamos pero él no se bajaba del burro. Yo, aprovechando que estaba de espalda le arreé una gran patada. Se volvió indignado con toda energía y dirigiéndose a Macario que también llevaba bigote, le ordenó airadamente que se fuera a la caseta. Éste con gesto de asombro le decía, echándose las manos a la cabeza: "¡Señor árbitro, pero si yo no he hecho nada!". Entonces, el árbitro le dijo: "¡Anda sinvergüenza, caradura, que te vi el bigote por el rabillo del ojo!". Una vez en la caseta Macario no salía de su asombro y yo le decía: "¡Pero hombre Macario ! ¿Cómo se te ocurre pegarle una patada al árbitro?.
Macario.
¡POR AQUÍ NO PASA NADIE!
Así se expresaba nuestro duro y pundonoroso defensa del bigote Beneyto, con la finalidad de amedrentar a los delanteros contrarios. El bravo lateral amarillo marcó toda una época en la UD Las Palmas, siendo uno de los jugadores más recordados por la afición.
Beneyto.
Último contrato de Gilberto Beneyto con la UD Las Palmas, correspondiente a la temporada 1959/60.
Viene de la página anterior
Ficha de inscripción del jugador Gilberto Beneyto guardada en los archivos del club amarillo.
Beneyto ingresó en el club amarillo procedente del CD Málaga en la temporada 1951/52 causando baja en 1960. Tiene en su haber la cifra de 175 partidos oficiales de Liga y 17 de Copa del Generalísimo.
- Cuando dejé la UD Las Palmas pude seguir jugando al fútbol ya que tuve varias ofertas pero ya me encontraba algo cansado de tantos viajes y mis negocios los tenía abandonados. Mis dos hermanos y yo heredamos una fábrica de caramelos y turrones en la calle La Naval. Posteriormente trabajamos en una horchatería en el Parque de Santa Catalina donde permanecí hasta mi jubilación.
El día de su boda con Dña. Mª Del Pino Naranjo Viera en la Basílica de Teror.
Cuando estos volúmenes salieron a la luz, Gilberto Beneyto presentaba un estado de salud y forma inmejorable, practicando diariamente el deporte del tenis formando pareja con su inseparable ex compañero de la UD Las Palmas Marcial. Un aciago día al regresar a casa después de una partida de tenis sería arrollado por un automóvil en la calle León y Castillo. Su fallecimiento constituyó un hondo sentir de duelo en toda nuestra ciudad. Gilberto Beneyto Bornay fallecería el 14 de julio de 1997.